
-Seth, no se despierta.- me estaba desesperando.
-Ten paciencia Nessie.- me lo decía como toda la paciencia que yo no tenía.
-Paciencia. Quieres que tenga paciencia…- respire y dirigí mi mirada a él.- Hemos esperado una hora, una hora es mucho.- cuando me iba a volver a sentar escuche un gemido
-Ahh, ¿Qué paso?- dijo Jake tocándose la cabeza.
-Bueno tu y Nessie se resbalaron y cayeron por las escaleras.- Seth se paro pero aun estaba mirando el vaso con mantecado.
-¿Nessie, está bien?- pregunto poniendo su mano en la cabeza.
-Ella está aquí.- contestó Seth
-Sí, si yo estoy bien. Pero no te preocupes por mí, tu estas peor que yo.- “estas peor que yo” Renesmee Carlie Cullen Sawn eres una idiota, tantas cosas que le puede haber dicho y lo primero que se me ocurre es “estas peor que yo”. Eres una tonta.
– Pero no te preocupes, solo descansa. Sue llegara ya mismo. Se tardo porque fue a dejarle comida a tu padre, ya viene de camino para que comas algo.- el me miro a los ojos. Me perdí en ellos, como me hubiera gustado tener el don de mi padre, me daba mucha curiosidad saber que estaba pensando. Pero el empezó a concentrarse, como si estuviera procurándose de todo los olores de la sala.
-Jake mamá se tardara un poco ¿quieres que te dé un poco de mantecado? – dijo Seth metiéndose un gran cucharon de mantecado.
-¿Sera mucho pedir? - dijo señalando el vaso que tenia Seth.
-Jacob Black te caíste de unas escaleras. ¿Cómo quieres comer mantecado?- lo regañé
-Tengo hambre.-
-Bueno Seth tráele unas frutas. Me parece que en la nevera hay unas fresas. El mantecado es un aperitivo, no una comida.-
-No, Seth no tráeme mantecado.- comenzó a fastidiarme
-Seth, le traes las frutas. Sue llegara en cualquier momento, espera a que llegue y come lo que ella vaya a preparar.-
-Seth no.- persistía
- Seth las frutas y punto.- culminé
-Nessie será un poco de mantecado nada más.-
-Seth no me ayudes tanto.- le dije
-¿Por qué no hacen mejor una batida con ambos?- Jake y yo lo miramos con un poco de asco y él se hecho para atrás.
-Nessie perdón pero no se qué diantres te dan de comer en tu casa. Pero este es mi estomago y yo como lo que yo quiero.-
-Mira Jacob Black, por no haber tocado la puerta paso todo esto. Así que o comes las frutas o no comas nada.-
-Ah sí, ¿Y cómo lo piensas hacer?-
-¿Me estas retando?- ya me comenzaba a molestar
-Tómalo como quieras.-
-Bueno.- corrí hasta la cocina y abrí la nevera. Jake me siguió y trato de pararme. Tenía el mantecado en las manos. Cogí una cuchara y me acerque a la basura.
-Nessie dámelo.- me gritó
-Lo quieres, pues búscalo.- lo tiré en la basura.
-Así es la cosa.- el se dirigió a la nevera y cogió todas las fresas.- Bueno, ojo por ojo.- lo tiró sin pensarlo dos veces. Nuestros cuerpos estaban unidos, el de él estaba justo al lado de la basura y el mío al frente de su pecho. Mis manos estaban en mi cintura y las del las tenía a bajo.
-Ya basta ustedes dos. Me tienen cansado, parecen niños. Compórtense como adultos, son mayores cuando les conviene, si tienen la edad suficiente y son responsables cuando se trata de beber sangre o matar vampiros malos.- Jake y yo nos miramos y nos alejamos uno del otro.- Se supone que sea yo quien este al mando porque ustedes fueron los que se cayeron. Así que van hacer esto. Primero Jake vuelve al sillón y Nessie retírate a tu recamara. Segundo llamaré a mi madre para que compre mantecado y fresas. Muévanse que no tengo todo el día.- nos ordenó Seth
-Ahh, dile a Sue que perdón por lo que hice si.- me sentí pésima, hubiera dejado que Jake se lo atragantara.
-Sí, llámala y dile que compre mas mantecado.- concluyó Jake
Como le gusta enojarme. Odiaba eso de los hombres.