
Pov Heilyn
John y yo íbamos al frente, pero teníamos amarrados las manos y con dos rebeldes detrás de nosotros con unos cuchillos que parecía más una espada. Caminamos unas cuantas horas. A lo que llegábamos los rebeldes estaban apostando de a quien iban a matar primero de nosotros cuatro. Por primera vez en mi vida no tenía miedo. No sé porque no lo tenía, pero en parte era bueno para que vieran seguridad en mis palabras. Cuando intentaba recordar al verdadero miedo fue en pocos los momentos que pase siendo humana. La primera vez fue cuando me perdí en un bosque de noche, fue horrible, estuve pérdida tres días, casi cuatro. Otra que me acuerdo fue un día que usaron a mi novio como rehén mientras robaban el banco del pueblo. Pero el mayor de los miedos que pase fue cuando llego la gripe al pequeño pueblo, era horrible ver a cada día humo e entierros, a cada hora decaídos por la enfermedad, a cada minuto viudas e madres llorando su perdida y a cada segundo ver la desesperación de las personas huyendo del pueblo. Esos días fueron los peores para todas las personas. Cuando mi novio me convirtió en vampira mis padres me dieron por desaparecida y cuando me asomaba por la ventana se veían felices porque ellos creían que estaba lejos de ese lugar. Semanas después murieron, mi padre por la gripe y mi madre por una bala que tiro al aire de un idiota que se volvió loco. El señor quería matar a su esposa e hija para que no sufrieran pero mi madre intervino, ya que en el mundo no le quedaba nadie por que vivir. Me dio una rabia ver el cuerpo de mi madre tirado en el suelo y su sangre derramada, fue algo que nunca en mi eterna vida se me va a olvidar. A John su padre ya tenía la enfermedad y lo llevo con un muchacho que conocía a un vampiro que le podía hacer el favor. El señor O’Conell tenía una especia de obsesión con ellos, dio con uno a sus quince años y desde ahí mantuvo su amistad. John antes de desaparecer para convertirse rompió el compromiso unas semanas antes, eso fue muy duro. Estuve casi dos semanas con ese dolor en el pecho. Estuvo tres días inconscientes y más de cuatro cazando para recuperar fuerzas. Cuando se recupero su padre aun estaba vivo pero no tenía fuerzas, el fue y antes de que su padre diera su ultimo adiós se despidieron. Después fue por mí. Yo trataba de no acordarme de esos momentos ya que me traían recuerdos de una persona que nos abandono a la suerte, que nos echo y nos negó su ayuda él…
-Heilyn llegamos.- me susurro John
-No lo puedo creer, existe.- Joseph no dejaba de admirar la casa, mientras yo esperaba a que nos liberaran.
-Sí, tiene dos pisos, dos baños y 7 cuartos, más un cuarto que esta el televisor y unos libros.-
-Que bueno.- dijo Joseph caminando hacia la casa.
-Espero que sea de su gusto, ¿Pero nos puedes soltar?- le recordó John.
-¿Y quien les dijo que mi palabra siempre cumple?-
-¿Qué? ¡No Nessie, Jake!- grite.
- Jake.- dijo Nssie tratando de darle la mano. Se volvio un alboroto, yo tratando de soltarme de dos vampiros y John mas de tres. Logre ver por un instante a Nessie y a Jake que luchaban por unirse pero estaban lejos de lograrlo.
-Sueltenlos.- dijo un hombre entrando.
El extraño hombre entro camino a paso de humano hasta llegar al lado de Joseph. Los demas vampiros se echaron para atrás y los que estaban aguantando a Nessie y a Jake los soltaron rapidamente. Lo mire cuidadosamente y no podia creer que ese hombre fuera una persona importante para mi.
-Alexander.- dije, el nos miro y se quedo mirandonos por unos segundos. Era él, uno de mis antiguos amigos. Hace mas de una decada que no lo veía.
-Alex, que sorpresa.- dijo apenas John.
-Joseph, sueltalos.-mando aun mirandonos.
-Pero… lo iba hacer. Pero…-
-Pero nada. Haz lo que te digo y ya.- el se quedo unos segundos antes de acerlo, el preferiria esperar a hacer lo que le ordenen qu equedar en ridiculo.
-Suéltenlos.- en cuanto nos soltaron fuimos directamente donde a Jake y Nessie que ya habían sido liberados por la simple cobardía de los vampiros hacía Alexander.
-¿Están bien?- le pregunte mientras los abrazaba.
-Sí, lo estamos. Pero pase un susto increíble.- decía Nessie aguantando fuertemente una cadena que no podía ver bien.
-Todos lo pasamos.- le asegure eso.
-Gracias por venir a rescatarnos.- le agradecía Jake a John.
-No fue nada, no le podía dejar todo este problema a Heilyn.-
-Bueno, te lo agradezco de todo corazón y que lastima que nuestro último encuentro terminara así.-
-¿Que ultimo encuentro? ¿Es que piensan regalarle el dinero al aeropuerto?-
-¿Vas a ir con nosotros a Italia?-
-Claro que si, tu madrina me hizo abrir los ojos, pero me los abrió muy bien. Jake, Nessie quiero pedirles disculpas por mi comportamiento, perdónenme por abandonarlos en el momento cuando más nos necesitaban.-
-No te preocupes, todo está en el pasado.- mientras se disculpaban se abrazaron sellando ese capítulo de su vida atrás.
-Ustedes, los cuatros vengan.- nos ordeno Joseph junto con Alexander.
-¿Si?- contesto John ya que en si era el jefe de nuestro gran grupo.
-Solo que, les ofrezco toda mi amistad y de cada uno de mis seguidores.- dijo Alexander.
-Bueno, aceptamos con mucho gusto.- le dejo saber John
-No nos mintieron si no que nos pusieron al día, nunca en mi vida supe que ustedes vivían tan cerca.- termino Joseph.
-De nada.- Joseph miro a Alexander y se fue con los demás a la casa.
Mientras él se iba John y yo estábamos felices de avernos encontrados con nuestro mejor amigo, lo más a cercano a un hermano. Me alegraba avénmelo encontrado, aunque en las condiciones en que nos encontramos, no mucho.