
Flash Back
Estaba jugando con Jake en el bosque, muy alejado de mi casa. Estaba muy feliz de poder jugar con él aunque no entiendo porque mis padres hacían tanto drama. Jake estaba sentado en una piedra mirando como yo bailaba.
-Jake, sabes ayer vi a mis padres bailando en la noche y se veían tan bien juntos.- dije aun bailando.
-Esa es la magia del amor Ness.-
-¿Tú crees que habrá algún hombre para mí allá afuera, con quien me casare y estaré el resto de mi vida?- le pregunte mientras daba vuelta y me detuve al frente de él. Me asusto un poco ya que vi que se tenso.
-Nessie Carlie Cullen Swan no hables de esas cosas. Si no quieres que se lo diga a tus padres. Si quieres habla de eso con tus tías y con Bella pero a mí no me hables de eso.- deje de bailar y lo mire asustada, pero él se bajo y se acerco a mi.-
-Ness quiero que sepas algo, sí. Aun te falta mucho para pensar en eso, pero debes tener presente que ya está escrito tu destino el único que lo puede cambiar es tu misma. Así que no te preocupes por eso, te falta todavía.- me lo dijo muy serio y lo escuche con mucha atención. EL bajo la mirada y eso me entristeció.
-¿Cuándo encontraras tú el amor Jake?- se quedo pensando un momento pero después me contesto.
-Cuándo crezca y se haga parte de lo que verdaderamente sucede en este mundo.-
-¿Hablas de Leah?- no sé porque la mencione pero era la única chica que se me venía a la mente.
-No, hablo de otra cosa… Más bien estoy esperando a que el lago Ness recobre vida.- me reí su respuesta, era algo raro pero Jake siempre seria Jake. Le iba a preguntar otra cosa pero los gritos de mi tía Alice me hizo retroceder.
-Nessie tus padres llegaran en cinco minutos, despídete.- gracias a mi tía Alice me veía con Jake, hasta envió a mis padres a un centro comercial bastante lejos a buscar la decoración de mi cumpleaños.
-Nos vemos Jake.-
-Nos vemos después.- el me abrazo y espero a que yo saliera del bosque.
Fin del Flash Back
Comencé a reírme. Jake se levanto un poco y me miro extrañado. Me tape con su pecho, trate de calmarme pero el recuerdo volvía.
-Amor recuerdas la primera vez que hablamos del amor.-
-En verdad, no.-
-Fue cuando fuimos al bosque y yo te pregunte quien sería el hombre con quien compartiría mi vida y se casaría conmigo. Y tú pusiste esa mirada de protector.-
-Si, en ese momento pensé en que si te casabas con otro hombre que no fuera yo ibas hacer viuda en poco tiempo.-
-No bromees con eso.-
-Pero, después me imagine que ese hombre era yo y se me olvido que apenas tenias 8 años.- se mantuvo callado pero hablo otra vez.- Perdóname.-
-¿Por qué? -
-Por qué ese día te grite, lo recuerdo ahora. Cuando volví a casa me sentía mal.-
-No hay nada que perdonar amor, solo fue un momento de sorpresa. Yo hubiera hecho lo mismo.- el se acerco y me dio un tierno y suave beso. – Te amo.-
-Igual yo, más que nada en este mundo.